


Sí! antes era una pollera negra que mi hija jamás usó, la miré, la observé, me la medí, y decidí que sería un lindo vestido de verano para la playa (playa, playa, playa, qué hermosa palabra a esta altura del año que ya añoro las vacaciones!!) Solamente le integré unas terminaciones en crochet, una especie de voladito arriba y un par de breteles, y voilá!! vestido pronto!!